La compañía se ha visto obligada a desembarcar a todo el pasaje alegando problemas técnicos, aunque asegura que la carga y los vehículos viajarán a su destino.
Las navieras, que mantienen las tres frecuencias semanales, incorporarán en verano el smart ship Abel Matutes, que navegará a gas y será, por tanto, el más sostenible y el mayor en capacidad de carga y en eslora de los que atienden esta conexión.