Se trata del quinto informe de control ambiental tras el incidente de las gabarras hundidas en 2018 y es el que debe certificar de forma definitiva la ausencia de contaminación en esta parte del litoral majorero
En esta nueva operativa el remolcador transporta una barcaza que contiene en torno a 870 toneladas de acero procedentes de las gabarras que fueron rescatadas del fondo del mar. Para liberar por completo el puerto únicamente resta terminar de cortar y sacar a flote la embarcación que queda sumergida, la Taehug 2, una operación que se desarrollará a lo largo del mes de septiembre.