Constituye el primer tramo de una financiación de 1.030 millones de euros, aprobada por el Banco Europeo de Inversiones (BEI) el pasado 19 de septiembre, y destinada a completar el proyecto de construcción de la línea ferroviaria de alta velocidad entre las tres capitales vascas. Esta infraestructura permitirá mejorar, además, la conexión entre Madrid y el País Vasco, y entre España y Francia.
Se estudiará la posibilidad de optimizar la infraestructura existente en los tramos Zaragoza-Castejón y Pamplona-Y vasca, y se elaborará un nuevo convenio para el tramo Castejón-Pamplona.